Antes de cualquier cosa, debo decir que esta universidad es mi Alma Mater. Acá empecé mi formación profesional como publicista, pero aún así siempre ha estado en boca de las controversias. Hoy no es una por problemas financieros ni similar, más si por publicidad engañosa.
Hace poco se publicaron los resultados de la prueba de calidad de educación superior ECAES; La U San Martín tuvo algunos resultados destacados por parte de sus estudiantes.Hasta ahí...normal. El pecado empieza cuando sale en los medios, anuncios de la Universidad, apropiandose del segundo puesto a nivel nacional en odontología. Cuando la realidad es un segundo puesto en UNO de los módulos del exámen.
Según declaraciones del viceministro de Ecuación Superior, Javier Botero, dadas al diario El Tiempo, "En el caso de la publicidad indebida, a un estudiante le había ido muy bien en uno de los módulos específicos de los Ecaes y se generalizó como segundo puesto en odontología". Y agregó que contra esta institución cursan, además, tres investigaciones administrativas iniciadas este año.
La contraparte dice que "En ningún momento se ha manipulado información. La publicidad es totalmente cierta. Sus estudiantes han logrado posiciones destacadas por encima de otras universidades y, en cuanto a los códigos, se debió a una falla en la imprenta", dijeron los abogados".
Mi opinión es de sentimientos encontrados, pero Don Draper diría simplemente que nunca nunca ni por error de imprenta ( el cual es un pésimo pretexto ) se debe aprovecharse de cifras que pueden ser malintencionadas o malinterpretadas para ventaja propia.
¿El resultado? , una multica de $160 millones de pesos por publicidad engañosa. Así la Universidad entra a los casos de pauta más cara en Colombia.
Mal muy mal por mi Universidad y ojalá la apelación no sea un caso aún más bochornoso.
Texto por Daniel Piza
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